Como observamos este problema está presente en la actualidad, y ocupa numerosas portadas de periódicos y telediarios. En muchas escuelas está presente el llamado “bullying” o acoso escolar. El bullying es el maltrato físico y/o psicológico deliberado y continuado que recibe un niño por parte de otro u otros, que se comportan con él cruelmente con el objetivo de someterlo y asustarlo, con el propósito de obtener algún resultado favorable para los acosadores o simplemente para satisfacer la necesidad de agredir y destruir que éstos suelen presentar..Cada vez son más los casos como el de Cindy.
Hay diferentes tipos de bullying como el físico (empujones, patadas, agresiones con objetos), el social (pretende aislar al joven del resto del grupo y compañeros), el psicológico (minan la autoestima del individuo y fomentan su sensación de temor) y el verbal (insultos y motes, menosprecios en público, resaltar defectos físicos… suele ser el más habitual).
En cuanto alguien sabe de alguno de estos casos es debido denunciarlo por el bien del colegio y del alumno, porque sino las represalias podrían ser mucho más graves tanto para el alumno como para el colegio y, cómo no, para la persona que lo sabía y no quiso actuar para poder resolver el problema.
El acoso escolar no solamente afecta al niño sino también a la gente de su alrededor, ya que éstos pueden estar extrañados por el cambio de comportamiento o rendimiento escolar del mismo.
Nuestra conclusión es que cuanto antes se empiecen a denunciar los casos, antes podremos erradicar el problema. Ya que a nadie le gusta que la gente de su alrededor sufra este tipo de maltrato, y los niños deben entender que la violencia no lleva a nada bueno y que el diálogo es esencial para poder convivir mejor en la sociedad. Además una feliz infancia es lo que todo el mundo desea para sus hijos y es fundamental para un buen futuro.
Fátima y Rosa*
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